Lima, 24 Diciembre 2009.- La navidad es símbolo de alegría y de unión, más allá de los regalos y fiestas que se tejen a su alrededor, es que el nacimiento de Jesús debería ser festejada como un acontecimiento que debemos realzar y defender por ser el bastión de la unidad hogareña.
Muchos ni se acuerdan que el amor a sus semejantes se debe dar en todo momento y no esperar estos días para contentar a los suyos con un buen regalo o una buena cena navideña.
En nuestra clase política también se da lo mismo, muchos padres de la patria y demás instituciones públicas creen que comprando un buen lote de juguetes de plástico de a tres soles se dan por bien servidos, cuando todos sabemos que lo hacen por ganarse una próxima curul en las próximas elecciones o quedar bien ante la opinión pública.
Sin embargo debemos dar gracias a Dios porque la gran mayoría de nosotros tenemos una familia donde pasar nochebuena, ya que día a día el incremento de la niñez desvalida se incrementa más; cosa que las famosas "chocolatadas", en su gran mayoría, resulta insuficiente para un grueso de habitantes que por preferir laborar no puede asistir a esos eventos que realizan los municipios, gobiernos regionales y demás entidades para, mayormente, darse un baño de popularidad, aunque, como decimos, muchas veces, eso ni se siente. Felizmente hoy en día todos los colegios realizan este tradicional evento que compensa lo que en muchos hogares, tal vez, falte. Vale decir el tradicional chocolate, el panetón y los juguetes para nuestros hijos.
¿Es que la navidad es incomprendida o solo concita interés de algunas personas? “Por sus acciones los conoceréis” dice un conocido refrán, hay muchos que aprovechan estos días para hacer “su mea culpa”, creen que con regalar ya lograron exculpar su alma.
Cuándo existirán personas que apoyen de manera desinteresada a los más necesitados, el día que nuestra sociedad comprenda esto, nuestro país dará un paso importante porque no por dar un juguete o una taza de chocolate, el problema de nuestra niñez se soluciona, porque ellos pertenecen a un lugar donde no habrá panetón o juguetes, porque algunos padres no tienen un empleo digno que compense esta carencia. Porque, en algunos casos, sus jefes en el trabajo, les adeudan sus pagos mientras ellos sí reciben jugosos sueldos ó a muchos ni siquiera les dan un aguinaldo porque simplemente para ellos no existe una bonificación y ni siquiera un seguro con que atender a sus familiares.
Pero a la hora de estas fechas los empresarios, políticos, alcaldes o jefes de medianas empresas sí son los primeros en brindar “chocolatadas” “reuniones de camaradería” ó darles a sus empleados “un panetón” porque así cumplen con sus conciencias.
Por ello intentemos darle a esta navidad su real dimensión, aquella en que se sustenta en la unidad familia, en saber disculpar o perdonar, en mejorar nuestro trato con los padres, hijos y hermanos, en apoyar al más débil.
Por eso, no solamente deseemos unión y amor sino que nuestro país, siquiera, dé un paso importante para el cambio, y ello tal vez pueda realizarse si, siquiera, algunos de nuestros deseos puedan ser cumplidos como, que no existan "degenerados" que violen a nuestros hijos y no les pase nada; que los hombres no orinen en la calles a la vista y paciencia de los transeúntes, incluso, de las niñas que pasan por los míseros rincones del centro de Lima convertido cada día en un verdadero muladar; que los decanos de los colegios profesionales ejerciten su labor pensando en su gremio y no en sus bolsillos; que la coima no sea "el pan nuestro de cada día"; que se efectúe una auditoria en varias universidades privadas donde los decanos y principales autoridades ganan más que el presidente (sin exagerar); que exista una ley de lobbys, proyecto, hoy, "durmiendo" en el baúl del olvido en el Congreso, para de una vez poder reglamentar y erradicar de alguna forma esa práctica que ha hecho que muchos se enriquezcan a costa de nuestro país; que exista revocatoria de congresistas y alcaldes; que pueda haber un único gremio que agrupe a todos los medios de comunicación en general; que alguna vez algún ex mandatario, asesor o ministro vaya a la cárcel por robar al país; que la Sunat mantenga esa "correa dura" no solo con los pequeños contribuyentes sino también con los de "cuello y corbata" a quienes se les exonera de todo pago; que el cargo de congresista sea ad honoren porque allí veríamos que perdería todo interés de muchos políticos el querer postular y llegarían los que verdaderamente quieran servir al país y no servirse de él; que la Federación Peruana de Fútbol (a pesar de la FIFA) sea objeto de una auditoria y que tanto inepto sea sacado de los altos cargos que hoy rigen a nuestro fútbol; que se le suba el sueldo a los policías y que se les brinde todo el apoyo a nuestras Fuerzas Armadas con el atenuante de que, si existe corrupción también se les castigue con todo el peso de la ley; que la burocracia sea exterminada de toda oficina pública; que se castigue todo acto de corrupción con una severa sanción penal; que el Poder Judicial sea totalmente reorganizado; que exista una ley plural y transparente para todo tipo de Asociaciones, sindicatos y ONG que solo sirven para que unos cuantos ganen como “rey” a costa de las minorías; que se combata la piratería, pero que se regularice los impuestos a los productos originales para que esté al alcance de las mayorías; que los libros sean exonerados de impuesto; que los ministros y funcionarios públicos tengan un cuadro de remuneraciones según sus méritos y funciones; que se inculque a nuestros niños el amar y defender a nuestro país sin recurrir al nacionalismo extremo, que patentemos nuestros principales productos de exportación; que mantengamos una correcta labor diplomática con nuestros vecinos sin dejar de observar lo que ello hacen y no hacen; que fomenten los valores en nuestros niños y aprendamos a defender nuestro territorio aún con nuestra propia vida y no permitir que ningún gobernante regale lo que por derecho nos pertenece; que prevengamos con verdaderos expertos el problema de la escasez del agua; que nos dejemos de falsa perorata y comencemos a equipar a nuestras Fuerzas Armadas.
Para que nuestro país salga adelante necesitamos que nuestros compatriotas se den la mano con unión, fuerza y amor, que nuestros buenos actos sean todos los días y no sólo en estas fechas. Por una patria mejor, que el fuerte no pise al débil, que el político no codicie más poder, que el alcalde no se aproveche de sus funciones, que nuestra justicia sea más rápida y justa, por esto y mucho más. Por ello, levantemos nuestra copa y brindemos por un Perú mejor…
FELIZ NAVIDAD PARA TODOS……..
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