LAS REALES INTENCIONES

Lima, 25 Enero 2008.- Keiko Fujimori ha anunciado la creación de su nuevo partido político y con ello no oculta sus intenciones; toda vez que los partidarios fujimoristas junto con sus lideres han manifestado que uno de sus deseos es que si Keiko llega a la presidencia amnistiar a su padre, hoy recluido en prisión y siendo objeto de un juicio que hasta el momento se torna muy revelador.

Coincidentemente los peruanos (no todos por cierto ya que la televisión estatal hace mutis acerca del juicio a Fujimori, pero si nos endilga todos los discursitos patrioteros en la Casa del Pueblo), pero a pesar de ello escuchamos las declaraciones de Jorge del Castillo quien con gran decencia y sin poses políticas dijo lo que tenía que decir y hasta sacó a la luz pública un documento firmado por el general Nicolás di Bari Hermoza Ríos en el que, bajo su firma, se solicitaba la detención de diversos personajes “por órdenes superiores” .

Del Castillo relató como fue arrestado por unos 100 efectivos policiales en forma violenta y sin ninguna seguridad de que sus derechos serían respetados, le pusieron una capucha en la cabeza, lo amarraron y amordazaron y hasta en algún momento le colocaron una pistola en la cabeza.

Sin duda, a pesar de los aires triunfalistas de alguno de sus allegados y de su abogado defensor, “se le viene la noche” al ex mandatario porque ya son muchos los testimonios que lo perjudican. Pero esta de Jorge del Castillo es reveladora a pesar que el abogado defensor del ex mandatario intente confundir los hechos para limitar al máximo la responsabilidad de su defendido. Nakasaki dice que no es secuestro sino “un arresto”.

Pero ya hay varios testimonios que parecen penetrar esa endeble pared que se ha puesto Fujimori, como es la de negar o abstenerse cuando “las papas queman”. Incluso un ex miembro del grupo Colina, Marcos Flores Albán, que ejecutó dos matanzas en Lima por las que ahora se juzga al ex presidente Alberto Fujimori responsabilizó a Vladimiro Montesinos, jefe de inteligencia en el gobierno de éste, de ordenar una de las acciones en 1991 y la que desbarata todo intento posible de negación en esa telaraña en la que pretenden estar el ex mandatario y su asesor preferido.

Como ha sostenido el ex procurador Ronald Gamarra, abogado de la parte civil, que el testimonio de Flores Albán es de absoluta importancia pues “la mención hacia la vinculación de Vladimiro Montesinos no hace sino ratificar lo que ya se conocía".

"También es importante que sea un ex miembro del grupo Colina el que señale que la ubicación en el organigrama del grupo Colina estaba dentro del Servicio de Inteligencia Nacional" porque este organismo "reportaba directamente al señor presidente de la República, Alberto Fujimori", ha agregado Gamarra.

Por ello Fujimori necesita, más que nunca que desde ya sus cuadros operativos trabajen con miras a la campaña electoral del 2011. Un triunfo de Keiko Fujimori implicaría tácitamente “que el pueblo está con el chino y por ende quiere su libertad”.

¿El Perú real permitirá este desparpajo? Hay muchos que sostienen que luego del juicio legal vendrá el juicio político. Palabras pomposas que auguran un último intento del fujimorismo para sacar de prisión a uno de los mandatarios más cuestionados por sus abusos y atropellos. Como siempre hemos sostenido, el hecho que Fujimori haya gobernando bien no quiere decir que se le disculpe sus delitos y por ello este juicio revelará su culpabilidad o inocencia en la que obtendrá una inocencia o culpabilidad de la que todos debemos aceptar, pero respetando las normas impuestas por el Poder Judicial y no estar encarcelado “una temporada” y luego salir libre de polvo y paja e incluso ser tratado como “mártir”.

De todo este juicio saldrá una verdad y revelara el verdadero rostro de muchos. Por eso, a pesar del tiempo transcurrido no debemos olvidar la franqueza de Jorge del Castillo, a quien más allá de ideologías y apasionamientos políticos, debemos reconocerle su firmeza a la hora de precisar esos recuerdos incómodos que seguramente el fujimorismo en su conjunto no deseaba escuchar.

Son estos momentos en que uno desea que siempre nuestra clase política se porte de esa manera, con decencia y firmeza ante estos hechos, olvidando los compadrazgos que solo han servido para que la corruptela se enquiste en el poder.

García tendrá sus errores políticos y seguramente siempre cuestionaremos su pasado vergonzante, pero no debemos obviar que esta vez el APRA se ha portado a la altura de las circunstancias. Porque nada le costaba a García pedirle a del Castillo "moderación". Ello, no ha ocurrido y el país escuchó lo que fue aquella noche del 5 de abril. Algo que el pueblo aplaudió, pero al que debemos poner como ejemplo para que estos hechos no vuelvan a suceder. Critiquemos y denunciemos inmoralidades, pero no permitamos que a nadie, ni siquiera al peor de los corruptos, se le prima de sus libertades y se intente hacer justicia por meros intereses políticos amparados en un acto de supuesto amor y justicia para un pueblo que ellos mismos desconocieron pisoteando derechos y normas por todos conocido.

Continuará el juicio a Alberto Fujimori y seguramente muchas cosas más seguiremos escuchando ante la mirada impávida de un hombre al que sus familiares y amigos sueñan con sacar de esa prisión en nada comparada con aquellas mazmorras y sótanos del SIN que sirvió para matanzas, secuestros y extorsiones.

Aunque falta mucho sería bueno reflexionar y pensar que a nosotros nos llegará el momento de decidir si aceptamos la tesis de Keiko y del inefable Kenyi, o la apoyamos y con ello liberamos a su "inocente" padre o le decimos ¡No!. Una vez tuvimos que elegir a García porque no queríamos que el nacionalismo a ultranza llegue al poder gracias a la ausencia de verdaderas leyes electorales que no favorezcan a los políticos de siempre sino al elector mismo. Gracias a ello tenemos a García nuevamente en Palacio, este ejemplo será tomado por Raffo y compañía, “sí Alan llegó con su pasado vergonzante porque no podemos nosotros cuando Fujimori gobernó mejor”. Es lo que piensan las Marthas, Keiko, Kenyi y compañía. El pueblo decidirá en las urnas. Vayan pensando esto. De nosotros dependerá no caer en el ridículo internacional al aceptar que en un futuro no muy lejano se libere a un hombre que debe responder por sus actos y atropellos.