PARADOJAS DEL DESTINO

Lima, 19 Octubre 2008.- Finalmente Magaly Medina pasa en carne propia lo que sus ampayados y familiares sufrieron y vivieron. La periodista televisiva, acaso, la más poderosa del país, junto a su productor Ney Guerrero terminaron enmarrocados y conducidos a los penales de Chorrillos y “San Jorge”. Allí donde seguramente pasará, tal vez, menos de un mes en prisión, a pesar que la Jueza María Teresa Cabrera Vega dictaminó cinco meses para la conductora y tres para su productor.

No fue Lucho Cáceres a quien perseguía incansablemente y del que se mofó en su programa todo porque el actor trabajaba como vendedor informal (un empleo digno, por cierto) en Estados Unidos, no fue el “Vikingo” Thorsen, aquel actor que no cree en nadie y defiende sus ideas hasta con los puños (que lo diga Cristian Suárez), no fueron ni Mónica Adaro ni Yesabella aquellas vedettes que aunque su vida fuera silenciosa no tenía porque sacarlas en pleno acto sexual y poniéndoles una escandalosa “trampa”. Tampoco fue Gisela a quien poco menos que le dijo “fumona” y a quien sus cámaras y fotógrafos de su revista perseguían sin cesar poniéndola al borde de la desesperación y haciéndole pisar “el palito” muchas veces. Ni siquiera César Ritter de quien se mofó en su programa todo porque el actor soltó lagrimas y pidió perdón por los actos del que fue objeto. Ni que decir de Betito ni tampoco del pobre de Miki Gonzáles quien llamó a la conductora para casi entre lágrimas pedirle, por sus hijos, que no pasara las imágenes de, su entonces esposa, Celine Aguirre besándose con otro hombre.

Nadie de la farándula local pudo, lo que finalmente el futbolista Paolo Guerrero hizo y que, de algún modo, puso el parche a tanto exabrupto que hacía la periodista en su programa. Uno de los más vistos de la televisión peruana.

Todavía me queda grabada esa escena en el Estadio Nacional; cuando Guerrero era el crack a quien muchos elogiaban por el derroche que ponía en la cancha, pero en ese recordado partido ante Brasil sorprendentemente sale del campo al finalizar el primer tiempo aduciendo una lesión. Lo que desorientó y extraño a muchos aficionados que querían al “depredador” en la cancha.

Días después estalló el escándalo del Country y la Medina publicó esa foto que ahora le trae más de un dolor de cabeza. Las redacciones se paralizaron cuando casi al borde del mediodía esa tremenda jueza dictaminó cárcel para la conductora. Posteriormente con el correr de las horas y las declaraciones de ambos bandos. Curiosamente RPP sacaba sólo a Nakasaki y compañía mientras CPN entrevistaba a “los enemigos” de la Medina. No obstante algunas dudas se fueron disipando y aunque discrepemos con Magaly en muchas cosas; no por ello debemos dejar sentado que como periodista que somos repudiamos la forma como la Jueza ha dictaminado este arresto; lo que resulta tremendamente sospechoso en momentos en que el gobierno se derrumba y las denuncias de corruptelas están a la orden del día, mientras la rata mayor llamado Rómulo León sigue como no habido.

Es cierto, Nakasaki es “un viejo lobo” puede que haya estado dilatando el proceso y que Magaly en su testimonial haya admitido que la información vertida en su revista no fue exacta y que sus reporteros le habían inducido al error. Pero de allí a condenarla por cinco meses es más que un exceso. Con castigarla en lo que más siente, su bolsillo, y hasta prisión domiciliaria podría haber sido un duro revés para alguien que tuvo la oportunidad de rectificarse porque el futbolista le solicitó ello antes de entablar una querella.

Pero, Magaly envilecida por la soberbia siguió en sus trece y ahora duerme en Chorrillos y arrastra a Ney Guerrero que por lo demás no pertenece a la revista sino al programa de televisión de la Medina.

Claro está, ahora esta noticia genera sentimientos encontrados. Porque eso es lo que Medina desata. Ella ahora sentirá lo que muchos de sus “victimas” sintieron. Porque en el Perú, Magaly es indiscutiblemente la reina de los ampays y los chismes donde el raje y sus videos infragantis le han dado poder y dinero. Sus reporteros van a las conferencias a sacar el chisme y el cotorreo, el que se peleen dos figuras de la televisión es noticia para el programa, el saber si comen decentemente o quien paga la cuenta es vox populi que atrae a los televidentes que se ven a través de ese espejo televisivo, tal como sucede en cada esquina o en cada barrio de nuestra urbe.

Pero si Magaly está donde está es porque también ha tenido talento y astucia para meterse en el fango y de lo más profundo obtener noticias impactantes y sensacionalistas que gustaron a un grueso sector de televidentes. Los verdaderos no aquellos que forman parte de la portátil limeña y que apoyan a Laura, Magaly, Genaro, y tantos más, para beneficio propio.

Ahora, la conductora tendrá tiempo para pensar y seguir con su estrategia, que es ser víctima de una “cortina de humo” que aunque sea sumamente sospechoso, cada vez que oímos a Nakasaki comprendemos que la Medina no puede probar lo que dijo. Pero entonces ¿Paolo es inocente? La verdad, la duda será eterna. Ese desbande del Country solo lo saben los que estuvieron allí, las cámaras que lo captaron y que ahora dicen no funcionaban y un personaje clave, que seguramente ahora con todo lo que sucede tendrá mucho que decir cuando llegue al Perú. Ese es Jaime Bayly quien presenció todo ese bacanal que nos precipitó a esta vergonzosa eliminación. En verdad el sólo pensar que Paolín es inocente provoca serias dudas.

Mientras tanto la sentencia de esta tremenda jueza crea un peligroso precedente para los hombres de prensa. Además que con lo sucedido, Magaly se verá fortalecida porque en mi Perú, gracias a la portátil y al espaldarazo de algunos poderosos medios de comunicación. La popular “urraca” saldrá hoy, mañana o dentro de 15 días, pero saldrá y gritará a los cuatro vientos su inocencia además de ser víctima de este gobierno. Los que creen que Magaly reflexionará y cambiará. Esos, están más que equivocados; ya que esta sentencia la fortalecerá y volverá a través de su programa seguramente haciendo más de 50 puntos porque los televidentes deciden y ellos piden ver al máximo exponente del chisme y las desgracias faranduleras. Magaly Jesús Medina Vela. (Foto: Agencia Andina).