Lima, 26 Setiembre 2009.- A muchos causó sorpresa que Francis Allison sea nombrado ministro de estado. Mal que bien, pasaba sus días dentro de la municipalidad de Magdalena despachando y haciéndoles la vida imposible a sus vecinos al otorgar licencias de construcción en tiempo récord para edificios de importantes constructoras. Pasaba como uno más de los tantos alcaldes distritales que existen en la gran Lima. Y su gestión era inadvertida. Pero cuando García buscaba entre los alcaldes un ministro para su gabinete allí surgió un primer nombre en la lista de posibles ministros. Felipe Castillo, aquel exitoso alcalde de Los Olivos, e imbatible en dicho fortín. Pero no paso ni horas cuando alguien le dijo a García que Castillo había formado parte del fujimorismo y su nombramiento podría ser un traspié político.
Por ello, surgió casi al instante el nombre de Francis Allison, con el que muchos pensaban no habría problema por su casi oscura gestión, a la par que sería importante en el pretendido proyecto aprista que tenía que ver con la costa verde.
Pero, tal parece, que el escándalo de los “petroaudios” perseguirá al gobierno de García hasta el final de su mandato. Aquella, casi, sacra organización delictiva que benefició a coimeros, ladrones y lobystas, y cuyo destape provocó la caída del gabinete del Castillo cuyo sobrenombre de “tío George” lo recuerdan siempre los diarios opositores al régimen.
Pero la vida da sorpresas y cuando muchos pensaban que el clan de Rómulo León y compañía pasarían pronto al olvido. Este nuevo gabinete trajo más de una sorpresa con el flamante alcalde, aquel que no espero terminar su mandato edil, sino corriendo fue al llamado de García para colocarse un fajín ministerial con el mayor desparpajo al más puro estilo de aquellos que buscan oportunismo y notoriedad.
No obstante, como tantos politiqueros, el joven tenía sus secretos y ese consistía en haber recibido 64 mil soles de BTR, la “empresa” de los “chuponeos”, durante todo un año entero. Semejante destape ha provocado fisuras dentro de un gabinete que no se caracteriza precisamente por su unidad, pero ¿Qué asesoría les dio Allison a esos delincuentes? ¿Por qué no le comunicó al presidente sus oscuros nexos?. A partir de allí vinieron una y demás contradicciones que desembocaron en el deplorable espectáculo que dio Allison en Palacio de Gobierno.
Visiblemente nervioso y totalmente fuera de lugar dijo con el mayor cinismo que “el presidente me dio todo su respaldo, al igual que mis colegas”. Mientras Velásquez Quesquén y compañía seguían despachando en Palacio y Alan ni siquiera se inmutó cuando en la Mistura 2009 le preguntaron sobre el tema: “Oiga, déjeme comer y saborear mi anticucho, hoy no hablamos de esos temas”, sostuvo García ensayando su mejor sonrisa.
Ahora los cuestionamientos aumentan por ello Allison debió haber presentado su carta de renuncia e irse por la puerta falsa, pero no ha sido así. Mientras García sigue en “cura de silencio” y los análisis y comentarios siguen a la orden del día. “Allison le sabe algo a García”, “Alan analiza la situación para darle la estocada en el momento preciso”, entre otras perlas sacuden las redacciones. Lo cierto es que luego que los militares cuestionaran en reciente ceremonia en Palacio de Gobierno, como siempre, a las ONGs. Hoy van saliendo a relucir muchas cosas desde el amiguismo con Giampietri, la llegada de 'Chito' Ponce Feijóo y hasta las proféticas palabras de Mantilla que termina siendo, cada vez que sale a declarar, ávido “adivino” de lo que se viene dentro de un gobierno que tiene muchas paredes ocultas a su alrededor y que al final, les ha venido salpicado el rostro ante la sorpresa del pueblo que ya sabe como es García y sus huestes.
Allison tiene los días contados y aunque esa “portátil” le haya dado “vivas” y “aplausos” la mañana de su presentación en el Congreso. Nadie lo salva de que se vaya por la puerta posterior. El mejor lugar de salida para alguien tan aprovechado e interesado.
