
Los tres serenos, entre ellos una mujer de nombre Rocío Meneses, tranquilizaron a los niños que estaban asustados. Los menores de iniciales J.B.O (6), M.Q.Q. (08) y C.R.M.(07), que vestían uniforme
escolar, mencionaron que querían ver el mar y jugar; el más pequeño, en cambio, refirió que no quería volver a su casa.
En tanto se aproximó una unidad de serenazgo para trasladar a los menores a sus viviendas, que por suerte se encontró escrita en los cuadernos que portaban los pequeños.

“Cuando fui a buscar a mi hijo en el comedor popular y no lo encontré, pensé lo peor, felizmente ustedes nos lo trajeron”, enfatizó Melissa Osorio, madre del menor de 6 años, quien vive en el vecino distrito de Surco.

Los agentes de serenazgo les dieron las recomendaciones del caso para evitar poner en riesgo la integridad de sus hijos, quedando, los padres de familia, conformes con el apoyo brindado.
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